Un total de 80 mujeres de distintas Iglesias y regiones del país, nos reunimos en Bogotá, los días 17 y 18 de febrero, para compartir nuestras inquietudes alrededor de dos temas que están afectando mucho nuestras vidas como mujeres: La implementación de las políticas neoliberales y la creciente situación de desplazamiento que se vive en el país.
El encuentro se concentró en tres aspectos: Realizamos una reflexión sobre lo que está ocurriendo en nuestros países con las mujeres populares, ante la aplicación del modelo neoliberal que se está implementando. Nos detuvimos a analizar el modelo neoliberal calificado por la economista Nina López Jones, como una economía de genocidio.
Igualmente miramos las graves consecuencias del desplazamiento y el éxodo masivo de campesin@s que está produciendo en Colombia la agudización de la guerra. Guerra de la cual, el 75% de las víctimas son mujeres. Miramos cómo esa proporción de víctimas no se corresponde para nada con la nula participación femenina en los diálogos y procesos de paz.
A continuación iluminamos esta realidad de dolor y sufrimiento, desde nuestra vida de fe y desde la relectura bíblica. En qué nos puede ayudar, iluminar e impulsar La Palabra Bíblica para enfrentar los caminos y retos que nuestra sociedad nos lanza hoy a las mujeres? Se miraron distintos textos del Antiguo y Nuevo Testamento, en los que encontramos un eco a nuestra situación.
Una parte importante del Encuentro fue la dedicada al compartir de experiencias: Mujeres de Chocó, de Medellín, de Apartadó y Urabá, de Bogotá, de Ibagué y Villavicencio, del Eje Cafetero...fueron dando su testimonio de dolor y de quebrantamiento ante la guerra...igualmente estas mujeres nos contaron y mostraron cómo, desde sus organizaciones femeninas populares, han ido respondiendo a una realidad de muerte y han ido tejiendo los hilos de la vida y la esperanza.
Mujeres que nos mostraron cómo la fuerza de la vida, el poder del amor, es capaz de enfrentar dinámicas y políticas del mal. Mujeres que se agrupan para reubicarse, para resistir, para aprender a habitar la ciudad, para procurarse un dinero necesario a los hijos, a la familia, a ellas mismas. Mujeres que nos dieron su testimonio de valor, un valor moral que no puede minar el proyecto de los poderosos que ignora el derecho de una vida digna y en paz para tod@s.
Una de las fuerzas más potentes que se descubre en el camino popular es la de la solidaridad. Las mujeres anudan sus dolores, pero igualmente anudan sus potencialidades y con ello redoblan sus logros y conquistas. Es por ello también, que nos preocupa el que muchas veces la voz de nuestras Iglesias no habla lo suficientemente alto, en favor de un sistema económico justo y redistributivo y para que los caminos de la paz sean más cercanos.
El Encuentro significó un alto en el camino, pero igualmente un confirmarnos en nuestro caminar, en nuestra fe, en nuestra lucha cotidiana para resistir y vivir. Fuimos acompañadas en estos días por la palabra y el testimonio de Gloria Cuartas, quien con su impulso nos motivó a continuar y a dar cada día un paso adelante en la conquista de nuestros derechos y en la reivindicación de la vida.
Finalmente en la hora de la celebración y el cierre, asuminos entre nosotras el compromiso de tejer nuestras redes y anudar nuestras mallas, de manera que el futuro no nos encuentre insolidarias ni desprevenidas. Es importante que las mujeres logremos trascender nuestro cotidiano quehacer, para que nuestra capacidad se multiplique.
Invitamos a las organizaciones femeninas populares que deseen participar en estas redes que se están tejiendo, a comunicarse con Ana Mercedes Pereira: altdesa@colomsat.net.co
